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Por: Daniel Sumalavia

He estado de viaje por Tarapoto y he repensado esta piedad durante varios días por lo complejo del caso y todas las posibilidades desde donde enfocarla (todo esto con la desesperación de Alfredo que iba en aumento al ver que no la subía) ya que la discusión sobre el caso de patentes entre Apple vs. Samsung tiene muchos temas muy interesantes para revisar, pero sospecho que tomará más de una piedad.

Una patente es un derecho exclusivo otorgado a un inventor respecto de un invento y una invención es un “producto o procedimiento que aporta, en general, una nueva manera de hacer algo o una nueva solución técnica a un problema”.

Pero inventar algo requiere un gran esfuerzo intelectual y en muchos casos una gran inversión económica. Es por eso que se otorga un derecho exclusivo al inventor hasta que este “recupere su inversión” y, a la vez, se promueve que luego de concluido el plazo de exclusividad el invento pase al dominio público para que todo el resto de personas nos podamos beneficiar de esta innovación. Hasta aquí todo suena perfecto, comprensible y razonable y desde esa teoría se puede deducir de forma sencilla que  “violar el derecho del inventor es aprovecharse del esfuerzo del otro para beneficiarse uno”; ojalá la realidad fuera tan sencilla.

Todo esto viene siendo producto de cómo se resolvió el caso de patentes más sonado de los últimos años, el de Apple vs. Samsung, en cuyo round más próximo en los EEUU se resolvió que la surcoreana Samsung había violado seis patentes de titularidad de Apple y tenía que pagar la módica suma de 1.050 millones de dólares, lo que generó una gran discusión no solo entre los expertos sino también entre los fanáticos de ambas marcas.

LOS FANS

Tras la sentencia, una de las primeras cosas que me sorprendió fue la “batalla” que se armó en las redes sociales entre los fanáticos de Apple (que no solo celebraban la victoria legal sino que acusaban de “piratas” a Samsung e increpaban a los fanáticos de la marca surcoreana) y los seguidores de Samsung, que acusaban a Apple de abusar de las patentes para buscar eliminar la competencia, e incluso resaltaban lo “rápido” que se había resuelto el caso, que duró 22 horas a pesar de ser un tema bastante técnico y complejo.

Esto último me da pie para resaltar nuevamente, como en otras piedades, la importancia de la marca y la identidad que se puede generar en los usuarios gracias a ella, así como la importancia que el tema subjetivo puede tener sobre la percepción de los usuarios. Tanto que pueden terminar teniendo fanáticos que solo faltaría ponerlos en una tribuna y parecerían barra brava.

Incluso el anuncio de Samsung en el último Super Bowl apuntó a este tema y agarró carne entre los fans de Apple, quienes con esta sentencia tienen para cobrarse la revancha:

EL VEREDICTO

Samsung y Apple controlan la mitad del mercado mundial de smartphones, lo que hace de esta batalla algo enorme y muy publicitado.

La sentencia del Juzgado de San José, en los EEUU, corresponde a solo una de las varias demandas y contra-demandas en trámite entre ambas empresas, siendo Apple quien comenzó esta cadena de ataques.

De hecho, la gran “guerra de patentes” tiene casos pendientes en 10 países diferentes. Por ejemplo, a finales de agosto, una corte de Corea del Sur determinó que ambas empresas, Apple y Samsung, habían violado las patentes de la otra, llegando incluso a prohibir la venta de productos tecnológicos de ambas en el mercado surcoreano.

Eso implica que esta millonaria sanción en contra de Samsung es solo uno de los muchos finales en los que se van a ver involucrados estos dos monstruos de la tecnología. Lo importante es que esto tendrá a mucha gente hablando sobre temas de propiedad intelectual, lo cual, desde Por Piedad Intelectual, consideramos genial.

Para que se hagan una idea: una de las patentes de Apple que se determinó que fue violada por Samsung, es la número US D618, 677 S y cuenta con la siguiente descripción:

“La superficie reivindicada de un aparato electrónico ilustrado con la designación de color para el color negro”. Adicionalmente se menciona que esto podrá ser utilizado en aparatos para música, video o videojuegos. Ahora cuando uno mira la “ilustración” a la que se hace referencia se puede ver qué es sobre lo que Apple tiene un derecho exclusivo, es decir, en qué consiste lo que nadie más puede usar sin su autorización:

Seguramente a esta patente se refirió el abogado de Samsung cuando dijo que Apple cree que "tiene derecho a tener el monopolio de un rectángulo de esquinas redondas y una pantalla grande” y efectivamente en eso consiste la patente, que pueden ver completa aquí.

Tendremos mucho más para comentar sobre esta gran batalla. Lo importante es que no perdamos de vista que los temas de patentes son bastantes complejos, incluso en casos como el anterior, ya que los límites que protege el derecho de patente afectan para bien o mal a los competidores y a los usuarios.

Veamos como vienen los rounds siguientes.